Nacimos en 2011 con una misión muy clara: hacer de las ciudades mejores lugares para vivir. Actualmente, han pasado diez años en los que hemos conseguido rodar por las calles de más de 40 ciudades en España y Latinoamérica, todo gracias a un equipo lleno de pasión y compromiso. También podemos afirmar que estos diez años han dado para mucho, y contamos con unas cuantas anécdotas y multitud de recuerdos que nos hacen proyectar una sonrisa.
Empezamos siendo una aplicación que conectaba a pasajeros con conductores, pero con el paso de los años, las ciudades y las necesidades de las personas han ido cambiando mucho. Nosotros también hemos ido evolucionando con ellas, y hemos trabajado duro para dar respuesta a cada uno de los retos que han ido surgiendo en el camino. En Cabify creemos firmemente que para mejorar los espacios urbanos es importante asumir el papel de agentes del cambio.
Hoy podemos decir que seguimos trabajando para mejorar las ciudades con la misma ilusión y emoción que el primer día, aunque, de vez en cuando, nos gusta hacer una parada para recordar esos hitos que nos traen tan buenos recuerdos. Nacimos en Madrid en 2011 y, un año más tarde, fuimos la primera aplicación de nuestro sector que nos atrevimos a “cruzar el charco” para aterrizar en México, Perú y Chile. Sin duda, lo recordamos como una auténtica aventura.
Recorrer las ciudades, escuchar a los usuarios y, sobre todo, al planeta, nos hizo detectar nuevas prioridades más allá de nuestros objetivos de llevar nuestra aplicación más lejos. Una de ellas fue la importancia de integrar la sostenibilidad como uno de los pilares clave en nuestro modelo de negocio para reducir el impacto de nuestra actividad.
En 2017 seguimos sumando buenas noticias, y fue todo un subidón descubrir que nos convertimos en el primer unicornio español. Un honor compartir el naming de una de las criaturas mitológicas más
espectaculares. Además, ese mismo año empezamos a trabajar junto a Easy Taxi, la mayor aplicación de viajes en taxi de América Latina, y con ellos nos convertimos en uno de las primeras apps que conectaban a sus usuarios con conductores colaboradores y también con taxistas de manera integrada.
Para nosotros, 2018 también fue un gran año, nos adherimos a la Red Española del Pacto Mundial de Naciones Unidas y asumimos un compromiso ambiental único en nuestro sector: nos convertimos en la primera aplicación de movilidad neutra en carbono en Europa y América Latina al compensar el 100% de la huella de nuestros viajes. A través de este programa, cuya trazabilidad aseguramos mediante tecnología- blockchain, hemos invertido en proyectos de reforestación y energías renovables en los países donde operamos. En estos cuatro años (2018-2021) hemos compensado más de 375.000 toneladas de CO2, o lo equivalente a lo absorbido por 21 millones de árboles en sus 10 primeros años de vida.
Desde entonces no hemos parado de trabajar para reducir nuestro impacto y, en 2019, al combinar tecnología y movilidad, integramos los servicios de micromovilidad en nuestra aplicación poniendo al servicio de los usuarios en España motos y monopatines eléctricos. Pero la sostenibilidad va más allá del impacto ambiental y debe contemplar la huella social. En este sentido, continuamos trabajando para ser una aplicación de acceso universal y en 2019 nos convertimos en un servicio 100% accesible para personas ciegas. A día de hoy, nos llena de felicidad poder ayudar a más de 70.000 usuarios que se están beneficiando de la accesibilidad en nuestra aplicación.
La llegada de la pandemia en 2020 fue un acontecimiento histórico que detuvo la movilidad en las ciudades. Sin embargo, desde Cabify continuamos trabajando para aportar valor a la sociedad, usando la tecnología como vehículo para ser un ecosistema de multimovidad más eficiente, seguro y sostenible. Un compromiso que nos permitió mantenernos más unidos que nunca, a pesar de la distancia física, y seguir moviendo a quienes estaban al frente de la batalla (nuestros sanitarios), así como de entregar, junto con ONGs y organizaciones civiles, apoyo, herramientas y esperanza donde más falta hacía.
Sin duda han sido diez años llenos de emoción y, si echamos la vista atrás, podemos decir que nos han regalado muchos aprendizajes, nos han permitido evolucionar y nos han dado la oportunidad de transformarnos para seguir satisfaciendo las necesidades que demanda nuestra comunidad. Hoy somos una plataforma de multimovilidad que apuesta por ser una alternativa clave al uso excesivo e ineficiente del coche particular, y seguimos trabajando con la misma ilusión para reimaginar las ciudades y ofrecer a las personas una movilidad en la que creer.
